· 

Día de las Vías Pecuarias y Caminos Públicos: Por un campo vivo y habitado

El mantenimiento de la ganadería extensiva, que, a falta de una definición oficial se puede entender como un conjunto de prácticas agronómicas y zootécnicas, medioambientalmente sostenibles y respetuosas con el bienestar animal; y encaminadas a obtener un lucro personal por parte del ganadero y un lucro colectivo por parte de la sociedad, en forma de servicios ecosistémicos; debe ser tratada de forma diferencial en las normativas europeas y nacionales; apoyada  y discriminada positivamente de otras prácticas ganaderas más agresivas con el medio ambiente y con el consumo de insumos. 

  

Este año, más que nunca, debemos reivindicar el mantenimiento, la conservación y el uso de las vías pecuarias como vertebradoras de un modo tradicional de vida: la ganadería extensiva y los actos de custodia del territorio. Asistimos, en los últimos tiempos, a la revuelta pacífica de las gentes del campo demandando, entre otras cosas, la simplificación administrativa que traba a sus procesos productivos, más aún a la ganadería. Las Administraciones Públicas nos han convertido; a falta de ganadería en las sierras, prados y rastrojeras, en “pastoreadores de papeles”, con una frustración creciente que también alcanza al personal funcionario que ven cómo tienen que hacer cumplir normas baldías que surgen desde despachos lejos del campo y que no tienen en cuenta los territorios y sus particularidades.

 

En los últimos tiempos se manifiesta una dualidad perversa que afecta a la trashumancia, vertebrada a través de las vías pecuarias y que conforma el gradiente máximo de extensificación ganadera, la ganadería extensiva. Desde la urbe, nos encontramos con algunos movimientos, alejados de la realidad ganadera y del terruño, que deterioran la imagen de la ganadería, auspiciados y ayudados por unas desinformadas autoridades que no son capaces ni siquiera de definir y legislar términos tan relevantes como pueden ser la ganadería extensiva ni cuidar la producción de los alimentos que consumen sus electorales. Todo a favor del capital y las reglas de su juego. Por otro lado, el acercamiento del gran público a la trashumancia y a la cultura pastoral en general, se asemeja más a una recreación de animación, alejada de la realidad, que a las prácticas tradicionales que llevaron la trashumancia y a las vías pecuarias a tener una importancia vital para el desarrollo y progreso del que gozamos en este país. 

 

 Por que queremos un campo vivo y habitado, porque queremos llegar a 2026, Año Internacional del Pastoreo con una ganadería ambiental real y digna.

 

- Asociación Nacional de Criadores de Oveja Montesina (ACRIMON)

- Asociación Nacional de Criadores de ganado caprino de raza Negra Serrana Castiza (ANCCA)

- Asociación Nacional de Criadores de ganado caprino de raza Blanca Andaluza (ABLANSE)

(Estas tres Asociaciones firman este artículo en el marco de Coexistir Mágina)

 

Escribir comentario

Comentarios: 0